El mayor beneficio de las soluciones de envasado compostable es que ayudan a limitar la cantidad de desperdicio de alimentos que termina en los vertederos. Además del desperdicio de alimentos en sí, los desechos orgánicos de los vertederos son una fuente importante de metano, un gas de efecto invernadero 25 veces más potente que el dióxido de carbono. Esto significa un efecto climático que no debe ignorarse en absoluto.

El uso de bioplásticos compostables en determinadas aplicaciones de envasado de alimentos permite una recuperación más eficiente de los residuos de alimentos. Los esfuerzos en esta dirección evitan que los materiales de embalaje compostables se viertan en vertederos. Las cápsulas de café y las bolsitas de té contienen una gran cantidad de producto que corre el riesgo de desperdiciarse, incluso después de su uso. Por otro lado, si se empaquetan junto con materiales compostables, estos productos se pueden recuperar más fácilmente con su empaque en la caja de residuos biológicos. Las cápsulas de café compostables también aseguran que se recupere el contenido orgánico del café restante.

En resumen, es posible crear recursos a partir de residuos mediante el compostaje. Cuando llega a la planta de compostaje, los residuos se convierten en una nueva fuente, el compost, un fertilizante natural que ayuda a regenerar el suelo. Este es uno de los mayores beneficios circulares de los envases compostables.

La mayoría de los desechos orgánicos, como frutas, verduras, lácteos, cereales, pan, servilletas de papel sin blanquear, filtros de café, cáscaras de huevo, carnes y periódicos, se pueden reciclar mediante compostaje. El principal beneficio de reducir la cantidad de desechos orgánicos que van a los vertederos es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y evitar que los lixiviados contaminen el suelo, las aguas subterráneas y las vías fluviales. Los materiales no compostables incluyen plásticos, aceite, vidrio y metales, envases de plástico, paquetes de especias, envoltorios de plástico, bolsas de plástico, papel de aluminio, pajitas, botellas, poliestireno o productos químicos.

El desperdicio de alimentos tiene propiedades únicas como materia prima para abono. El desperdicio de alimentos previo al consumo es más fácil de compostar, pero el desperdicio de alimentos posconsumo es más difícil debido a problemas de separación. A menudo, una vez que el consumidor ha terminado con los alimentos, los desechos quedan expuestos a contaminantes y es necesario decidir cómo separar los alimentos de los demás desechos.

Nuestra organización siempre sigue los estándares nacionales y extranjeros, las regulaciones legales aplicables y las prácticas generalmente aceptadas en los estudios de certificación y etiquetado. En este contexto, las empresas solicitantes,También proporciona certificación de compost y servicios de etiquetado de compost C-Label (etiquetado de compost).